Improvisados

DE LAS estrellas en el mundo del espectáculo hay quienes son famosos sin talento, gracias a que la tecnología las hace “cantar” y tienen millones de reproducciones en las plataformas (en el pasado vendían discos y sus éxitos eran reproducidos en la radio), pero también están los que sí tienen la capacidad, mucho camino recorrido y la experiencia para sobresalir en el escenario.

Y DE ESOS han venido al Foro de las Estrellas, hasta el momento han sido dos de las grandes ligas: Sting y Christina Aguilera.

CON EL primero vinieron a “seguirlo” hasta Aguascalientes reporteros de Inglaterra y de Estados Unidos, porque que Sting esté en un escenario ya no es algo común.

BUENO, COMO nunca faltan los despistados y en el mundo del espectáculo así como abundan los “artistas” que no son, también hay quienes se ostentan como reporteros porque un día se encontraron con las “benditas redes sociales” y creen que por traer un celular y grabar un video en automático se convierten en “periodistas”.

PERO NO, así no es la cosa. Entonces hay un montón de “sentidos” que porque son los meros, meros petateros “reporteros de espectáculos” región 449 y no les valió ser amigos del primo de un amigo para entrar como “periodistas” a los conciertos de esos dos artistas.

AH, QUÉ cosas, en el pasado había que saberse al derecho y al revés la historia de los artistas, su trayectoria, sus éxitos, sus ideologías políticas, etcétera, porque a nadie le importaba si se hacían cirugías o se prestaban a las o los amantes.

MENOS SI tenían hijos regados por cada estado o país que visitaban, eso era lo de menos, además en esos ayeres todos los artistas hombres eran “solteros” y las mujeres jamás, pero jamás, pasaban de los 30 años.

VOLVIENDO AL tema, los artistas que son estrellas tienen una serie de peticiones que se vuelven exigencias y que, por contrato, se deben cumplir: desde la marca de agua que debe haber en su camerino hasta que las grabaciones de periodistas (profesionales) no se hagan con celular, sino con cámaras de alta definición, como debe ser.

Y ES QUE por más que la marca de la manzana promueva que sus equipos son lo máximo y se pueden filmar hasta películas, los artistas de alto nivel tienen sus caprichitos y caprichotes… y hay que soportar.

ASÍ QUE quienes entienden eso no hacen olas y menos panchos, pero bueno, dicen por ahí que no se le pueden pedir peras al olmo, entonces tampoco a un fan que entienda la diferencia entre ser profesional y acudir a trabajar que ir de gorrita café a un concierto de artistas que tal vez en su vida puedan volver a ver. (BDR).