Por Rub\u00e9n Andr\u00e9s Moreno de la Rosa<\/p>\n
CUANDO SE<\/strong> dice que en Am\u00e9rica Latina el futbol es m\u00e1s que un deporte, se est\u00e1 completamente en lo correcto. El futbol soccer no s\u00f3lo es un actividad recreativa o un ejercicio para que las personas puedan tener mejor condici\u00f3n f\u00edsica, el futbol es una empresa multimillonaria con cientos de miles de fan\u00e1ticos a lo largo del subcontinente; es una forma de interacci\u00f3n social que se plantea no s\u00f3lo cuando se pr\u00e1ctica sino en las convivencias dentro y fuera de los estadios, antes de los partidos, durante los mismos e incluso despu\u00e9s.<\/p>\n EL FUTBOL<\/strong> incluso es una tradici\u00f3n familiar, con miles de familia a lo largo de Am\u00e9rica Latina tomando un partido como excusa para reunirse y hasta puede llegar a ser una experiencia religiosa. El futbol es verdaderamente un gran evento en el subcontinente y los jugadores que lo practican llegan a alcanzar el estado de celebridades internacionales capaces de mover grandes masas que desean verlo realizar su arte.<\/p>\n SIN EMBARGO<\/strong>, en el futbol, especialmente en los m\u00e1s aficionados a \u00e9ste, se generan una serie de fen\u00f3menos sociales, psicol\u00f3gicos e incluso pol\u00edticos que resultan de sumo inter\u00e9s analizar, por lo cual en las siguientes l\u00edneas se dedicar\u00e1 un espacio para analizar al futbol como escenario de desarrollo de identidad y al futbol como met\u00e1fora de los conflictos pol\u00edticos y sociales.<\/p>\n VALE LA<\/strong> pena se\u00f1alar, que estos fen\u00f3menos que se generan en el futbol tambi\u00e9n son susceptibles de generarse en otros deportes, sin embargo, dado el tama\u00f1o e importancia que tiene este deporte en el subcontinente se buscar\u00e1 centrarse \u00fanicamente en el mismo.<\/p>\n CUANDO HABLAMOS<\/strong> el futbol como un escenario de desarrollo de identidad, lo que se busca se\u00f1alar es que para los aficionados del futbol se lleva a cabo un proceso de adaptaci\u00f3n a las costumbres y pr\u00e1cticas de un grupo al cual se busca pertenecer y a partir del cual se construye una identidad propia.<\/p>\n EN ESTE<\/strong> sentido alrededor del futbol se generan una serie de ceremonias casi ritualistas donde se realizan pr\u00e1cticas como cantar himnos, resonar tambores en las tribunas, llevar banderas, portar los colores del equipo respectivo, asistir a los partidos o llevar a cabo la pr\u00e1ctica semanal de sentarse frente al televisor para ver la contienda deportiva. Del mismo modo que, aquellos que no participan de estas pr\u00e1cticas o las llevan a cabo con menor intensidad son en mayor o medida excluidos de esta interacci\u00f3n social.<\/p>\n SIN EMBARGO<\/strong>, este posicionamiento del futbol en nuestra pr\u00e1cticas sociales no s\u00f3lo se da dentro de los estadios, en la vida cotidiana de los ciudadanos de Am\u00e9rica Latina, en las noticias, en los medios de comunicaci\u00f3n, el futbol es una tema de debate constante. Se discuten las acciones de los jugadores, las decisiones de los \u00e1rbitros, la validez de las jugadas, las estrategias de los directores t\u00e9cnica, etc\u00e9tera.<\/p>\n A TAL GRADO<\/strong> llega esta posici\u00f3n por el futbol que existen cientos de personas y canales de deportes que han amasado grandes cantidades de dinero y fama narrando los partidos y discutiendo los mismos.<\/p>\n CUANDO NOS<\/strong> referimos al futbol como met\u00e1fora de los conflictos pol\u00edticos y sociales, lo que se busca expresar es que por estos mismos fen\u00f3menos de identificaci\u00f3n con los equipos y los jugadores, cuando suena el silbato para empezar el partido, no s\u00f3lo se est\u00e1 librando un combate entre 22 jugadores, sino que se est\u00e1 librando un combate entre los pa\u00edses, grupos, clases sociales y comunidades que se han identificado con ellos.<\/p>\n CUANDO JUEGA<\/strong> M\u00e9xico contra Estados Unidos o Argentina contra Brasil estos enfrentamientos est\u00e1n cargados de las rivalidades, procesos, alianzas y afectaciones que se han generado entre estas naciones a lo largo de los a\u00f1os y que las personas consciente o subconscientemente tienen en su imaginario y cuando un equipo vence a otro, es una met\u00e1fora de una victoria de todo un colectivo sobre otro.<\/p>\n ESTE FEN\u00d3MENO<\/strong> no est\u00e1 limitado al nivel nacional, a nivel regional, estatal, municipal o incluso intercolegial, se libran constantemente batallas entre los diferentes grupos sociales donde los jugadores son los representantes no oficiales de sus fan\u00e1ticos y cargan con ellos sus frustraciones, sus pesares, sus alegr\u00edas, sus pasiones, su historia y sus esperanzas.<\/p>\n ESTA IDENTIFICACI\u00d3N<\/strong> y trascendencia social que tienen los partidos, y el futbol en general, en parte pueden explicar c\u00f3mo y por qu\u00e9 se generan los encuentros violentos entre los aficionados de los equipos una vez concluidos los partidos. No es raro escuchar relatos de c\u00f3mo los fan\u00e1ticos de los equipos, incluso cuando estos hace mucho que han abandonado los estadios, discuten sobre los resultados de estos y en diversas ocasiones estas confrontaciones han escaldo a arrebatos violentos que en m\u00e1s de una ocasi\u00f3n han llegado a cobrar la vida de las personas.<\/p>\n CON TODO,<\/strong> esto es posible apreciar que el futbol no es s\u00f3lo un juego, es un parte fundamental de imaginario de las sociedades latinoamericanas que en gran medida sirve para definir su identidad y tiene una fuerte carga no s\u00f3lo econ\u00f3mica, sino pol\u00edtica y social.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Por Rub\u00e9n Andr\u00e9s Moreno de la Rosa CUANDO SE dice que en Am\u00e9rica Latina el futbol es m\u00e1s que un deporte, se est\u00e1 completamente en lo correcto. 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