{"id":106709,"date":"2018-02-05T07:49:09","date_gmt":"2018-02-05T13:49:09","guid":{"rendered":"http:\/\/127.0.0.1\/wordpress\/?p=106709"},"modified":"2018-02-05T07:49:09","modified_gmt":"2018-02-05T13:49:09","slug":"entre-letras-28","status":"publish","type":"post","link":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/2018\/02\/05\/columnas\/entre-letras-28\/","title":{"rendered":"Entre Letras"},"content":{"rendered":"

Humo<\/strong><\/span><\/p>\n

Por Lenina Nereida Ortiz Garc\u00eda<\/p>\n

\"\u201c\u2026nos

\u201c\u2026nos entreten\u00eda ver c\u00f3mo brotaba el agua formando bolitas de tierra que parec\u00edan girar\u201d<\/p><\/div>\n

HACE CU\u00c1NTO<\/strong> tiempo que vivimos en este pueblo\u2026 recuerdo cuando era ni\u00f1o, cada verano disfrutado al m\u00e1ximo. Todos los d\u00edas le avisaba a mi mam\u00e1 que ya me iba con Juli\u00e1n al cerro a jugar, y ella ligeramente sentenciosa me ped\u00eda que fuera con cuidado.<\/p>\n

ME LEVANTABA<\/strong> muy temprano, almorzaba con mi abuela que estaba siempre en la cocina tomando caf\u00e9 con su peculiar aroma que impregnaba toda la estancia hasta el jard\u00edn, donde regularmente se encontraba mi abuelo fumando, sentado en un banco de madera, sabr\u00e1 dios qu\u00e9 cosas pasaban por su mente, pero siempre estaba meditabundo, rodeado de humo, era una mezcla de aromas que danzaban por toda la casa. Mi abuelo alzaba su mano y pesada la dejaba caer en mi cabeza, sin decirme nada.<\/p>\n

ME IBA<\/strong> con Juli\u00e1n a jugar y ya \u00edbamos, ya ven\u00edamos, con una ramita de mezquite en cada mano, golpeando arbustos y piedras. Del cerro regres\u00e1bamos por donde pasaba la acequia, luego la segu\u00edamos caminando entre \u00e1lamos, en las partes m\u00e1s estrechas, la brinc\u00e1bamos de un lado a otro; algunas veces hab\u00eda se\u00f1oras lavando la ropa y furiosas nos gritaban si por alg\u00fan brinco descuidado les tir\u00e1bamos el jab\u00f3n. En el camino lleg\u00e1bamos a una tienda donde le vend\u00edamos frijol a Do\u00f1a Chuya, del que rob\u00e1bamos a mi abuela de un costal que estaba en la cocina, lo vend\u00edamos para poder pagar la entrada al \u201cOjo de Agua\u201d, de donde proven\u00eda la acequia.<\/p>\n

OBSERV\u00c1BAMOS EL<\/strong> fondo del agua un rato, nos entreten\u00eda ver c\u00f3mo brotaba el agua formando bolitas de tierra que parec\u00edan girar. Despu\u00e9s nos met\u00edamos a nadar y nos gustaba pisar las bolitas, se me eriza la piel s\u00f3lo de recordar el cosquilleo en los pies, pues en unas sal\u00eda agua muy fr\u00eda y en otras caliente. Casi todas las tardes llov\u00eda pero nosotros ignorando que se empezaba a nublar, nad\u00e1bamos incluso con la lluvia. Sal\u00edamos corriendo de regreso a nuestras casas cuando estaba lloviendo muy fuerte, descalzos y mojados, entre m\u00e1s tronaba el cielo m\u00e1s r\u00e1pido corr\u00edamos ni las piedras del camino terregoso sent\u00edamos en los pies.<\/p>\n

YA LLEGABA<\/strong> yo a la cocina, brincando de fr\u00edo, haciendo alboroto y gritaba mi abuela a mi madre aprovechando el significado de su nombre: \u201c\u00a1Socorro! Calma a tu cr\u00edo que no para de correr en la cocina, me va a tirar los trastes de la mesa\u201d, y yo re\u00eda a carcajadas, \u201ctengo fr\u00edo, tengo fr\u00edo!, por eso corro, abue\u201d. Mientras mi abuelo sentado en su silla de madera junto a la mesa observaba el alboroto lanzando bocanadas de humo del cigarro. De pronto el humo iba cubriendo la cocina por completo, no es s\u00f3lo el cigarro, algo se quema en la estufa, todos tosemos se vuelve negro mi alrededor y se alejan las voces que gritan, mi madre, mi abuela, el abuelo, yo corriendo.<\/p>\n

EL HUMO<\/strong> se extendi\u00f3 por toda la cocina hasta salir al patio, se prolong\u00f3 hasta la calle y el camino terregoso se empez\u00f3 a extender, se vuelve gris, escucho el tr\u00e1fico de los autos entre los edificios, un mesero viene hacia m\u00ed. Le pregunto si venden cigarros, asiente y menciona su repertorio de marcas, se aleja nuevamente, quiero regresar a esa cocina pero no puedo, el recuerdo termin\u00f3.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

Humo<\/p>\n

Por Lenina Nereida Ortiz Garc\u00eda<\/p>\n

HACE CU\u00c1NTO tiempo que vivimos en este pueblo\u2026 recuerdo cuando era ni\u00f1o, cada verano disfrutado al m\u00e1ximo. Todos los d\u00edas le avisaba a mi mam\u00e1 que ya me iba con Juli\u00e1n al cerro a jugar, y ella ligeramente sentenciosa me ped\u00eda que fuera con cuidado.<\/p>\n","protected":false},"author":2,"featured_media":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","sticky":false,"template":"","format":"standard","meta":{"_et_pb_use_builder":"","_et_pb_old_content":"","_et_gb_content_width":"","footnotes":""},"categories":[12],"tags":[],"class_list":["post-106709","post","type-post","status-publish","format-standard","hentry","category-columnas"],"_links":{"self":[{"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/106709"}],"collection":[{"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts"}],"about":[{"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/types\/post"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/users\/2"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=106709"}],"version-history":[{"count":0,"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/posts\/106709\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=106709"}],"wp:term":[{"taxonomy":"category","embeddable":true,"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/categories?post=106709"},{"taxonomy":"post_tag","embeddable":true,"href":"https:\/\/aguascalientes.pagina24.com.mx\/wp-json\/wp\/v2\/tags?post=106709"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}