“Acoso Escolar es una Realidad y Alumnos Llegan a Resultar Lastimados”
Por Benny Díaz
Nancy Gutiérrez Ruvalcaba
En las escuelas públicas y privadas ocurre lo mismo: “el acoso escolar es una realidad y llega al punto que hay estudiantes que resultan lastimados y en lugar de actuar llamando a una ambulancia para que sean remitidos a recibir atención médica, dejan pasar tiempo y lo que hacen es limitarse a llamarle a los padres de familia o tutores”, manifestó la diputada Nancy Gutiérrez Ruvalcaba.
No se puede tolerar la violencia ni una sola vez, aseveró, pero los mentores hacen caso omiso a las alertas que se presentan entre algunos alumnos que tienen problemas emocionales o viven violencia en casa, la cual reflejan en sus compañeros más vulnerables.
“Estoy proponiendo que debido a los casos que se presentan todos los días en las escuelas sobre este tema, es que obligatoriamente haya psicólogo o psicóloga de planta en la institución educativa y también, mínimo, una enfermera para que brinde los primeros auxilios si hay algún tipo de lesión”.
Nancy Gutiérrez señaló que lo vivió de cerca con su hijo, quien debido a la lesión y al tiempo que permaneció sin recibir primeros auxilios terminó en un quirófano porque requirió cirugía.
Los acosadores son fáciles de detectar, pero en muchas escuelas, aun cuando observan lo que sucede, no actúan y lo justifican como “cosa de niños”, “ha pasado desde todos los tiempos”, “no somos cuidadores” y “los valores se inculcan en casa”, entre otros argumentos.
Y sí, los valores se adquieren en casa, pero no todos los reciben de la misma manera y cuando existe violencia en el hogar o los menores son violentados por sus padres, descargan esa agresión en quienes consideran más vulnerables y lo que se permite una vez, se repite y escala hasta provocar lesiones o incluso tragedias. Por ello, en las instituciones educativas, sin excepción, debe haber atención psicológica permanente y personal capacitado para brindar primeros auxilios.
La congresista manifestó que después de hacer público su caso se dio cuenta de que muchas personas atraviesan situaciones similares y ni en la escuela ni en otros espacios encuentran solución ante la problemática de los estudiantes que son acosadores.
“Creo que cuando sean casos graves amerita la expulsión de la institución educativa, deben ser sanciones de ese tipo para que también ellos y los padres de familia comprendan que tienen un problema que resolver, no se trata de que se les cierre las puertas para que estudien, sino que se les expulse, acudan a terapia para que trabajen en lo que les provoca ser acosadores y que se les reciba en otra escuela, pero que ya exista ese antecedente, no para estigmatizarlos, sino para que tanto profesores como directivos estén atentos ante el actuar de estos menores y se les dé el seguimiento correspondiente”.
