“El Dinero es un Ídolo que Esclaviza, nos Quita la Libertad”
Por Benny Díaz

Juan Espinoza Jiménez (Foto: Facebook Diócesis de Aguascalientes/ Correo Diocesano)
El dinero es necesario para vivir, “para satisfacer las necesidades, sobre todo hoy en día, en donde los productos básicos se encarecen cada día, pero también no hay que ser ingenuos, porque hay que saber gastar lo necesario y Jesús es tajante en que no se puede tener un ídolo que se haga dueño de nuestra vida”, mencionó el obispo Juan Espinoza Jiménez en su homilía dominical.
El obispo de la Diócesis de Aguascalientes enfatizó que el dinero no debe convertirse en el eje principal de la vida, “porque se convierte en un ídolo que esclaviza, nos quita la libertad y Jesús no está en contra de las riquezas, pero sí cuestiona cómo se adquiere, cómo se gasta, cómo se distribuye y para eso hay que tener astucia y ser capaces de encontrar soluciones para saber administrar”.
Del mismo modo que ocurre con la vida, no basta enfocarse en el plano físico; también debe atenderse el espiritual.
Para ello, es necesario “saber cómo estamos administrando la vida para poner en el centro de ella a Dios, no al dinero y no debemos dividirnos para que construyamos una comunidad y generar condiciones para que busquemos una salida para tener una buena vida de servicio a Dios”.
Por ello, llamó a cultivar la espiritualidad y los valores, y mantenerse alejados “del dinero mal habido, debemos vivir con honradez y sobre todo que quienes tienen una empresa sean justos con sus trabajadores, que les paguen el salario justo y que tengan derechos y remuneración adecuada por el esfuerzo que realizan día a día para educar a sus hijos, y con el uso responsable del dinero y no caer en el consumismo y hay que ser solidarios desde casa, hay que enseñar a los niños a que aprendan a compartir, a estar juntos, a no ser egoístas ni individualistas, que lo que hay en casa es de todos y para todos”.
El purpurado exhortó a promover una economía orientada al bien común, “no cerrarnos a tener ganancias sólo en lo personal, hay quienes viven de su trabajo y ahí reestructuran su vida y brindan apoyo a la gente, eso es generosidad y porque están haciendo buenas obras para aquellos que se sienten perdidos por falta de recursos y hay que compartir de lo que se tiene, no de lo que sobra”.
El progreso económico, dijo, debe ponerse al servicio de quienes carecen de lo necesario, “eso es fraternidad y sirve para obtener la libertad que tanto se necesita para contar con una vida tranquila”, finalizó el jefe de la diócesis local.