
José Gabino Vázquez Vega
Las Lluvias
SE AGRADECEN por todos, pero también obligan a realizar reparaciones en las viviendas antiguas, sí o sí. De lo contrario, esas casas se deterioran a pasos agigantados.
NO SÓLO es impermeabilizar; también se debe atender todo lo relacionado con humedades e incluso cambiar las tuberías, ya que antes se utilizaban las fabricadas con cemento, las cuales con el tiempo se deterioran hasta desaparecer.
ESO NO sólo ayuda a “parar”, en la medida de lo posible, la humedad, sino también a evitar inundaciones cuando la lluvia es torrencial y no hay espacio suficiente para que uya el vital líquido.
POR ESO aseguran los funcionarios que pocos quieren vivir ya en el centro de la ciudad, porque dar mantenimiento a las viviendas no es nada barato. Prefieren comprar nuevas, aunque sea en municipios conurbados. (BDR).