
Rubén Galaviz Tristán
¿Quién lo Apadrina?
JUAN CARLOS Barnola Ochoa se jacta de que Jonás Chávez y Antonio Martínez Romo, sus superiores inmediatos, el primero por dirigir los Ceresos en Aguascalientes y el segundo por ser Secretario de Seguridad Pública Estatal, le hacen lo que el viento a Juárez.
ENTONCES ÉL puede hacer y deshacer. O sea, se considera más que Rubén Galaviz Tristán en el ISSEA, porque como coordinador de salud en los Ceresos, se comporta como amo y señor.
EL DECIDE quién vive y quién no, y no se exagera, pues ya van tres mujeres que han perdido sus embarazos por su negligencia.
UNA MUJER con VIH, según denunció Erik Romani Sánchez, fue diagnosticada con depresión y enviada al aislamiento, por lo que no recibió los retrovirales que requiere cualquier persona con esta enfermedad.
Y QUIEN pudo haber sanado de una enfermedad renal con tratamiento oportuno, terminó en hemodiálisis precisamente porque a Barnola le importa poco la salud de las personas privadas de su libertad.
YA NOMÁS falta que diga que, por el padrinazgo que tiene, aunque no revela de quién, puede incluso toserle fuerte a la gobernadora del estado.
Y LA MANDATARIA estatal, según Rubén Galaviz Tristán, tiene como prioridad la salud de todos los que viven en Aguascalientes, incluyendo a las personas privadas de su libertad.
CON ESOS colaboradores, ¿para qué quieren enemigos? Que se tomen medidas y se escuche a la población del Cereso Femenil. No vaya siendo que, por esos descerebrados que ocupan cargos donde está de por medio la salud de personas, la imagen que presume el gobierno estatal empiece a resquebrajarse. (BDR).
Rata
PERO NO sólo se puede achicar, sino volver enano el Gigante de México, porque con eso de que la directora del Cereso Femenil, Sandra Samantha Ruiz Esparza Durón, salió rata, de esas de dos patas, las cosas se ponen muy turbias.
Y QUIENES denuncian no lo hacen al tanteo: ya hay denuncias en la Fiscalía, fotografías, testigos… todas las pruebas que manden y gusten.
EL FISCAL dijo que está para dar resultados sí o sí. Vamos a ver cuánto tiempo pasa para que Samantha deje de ser la mandamás y se convierta en compañera de celda de las que ahora roba y extorsiona.
LA GOBERNADORA ha dicho muchas veces que en Aguascalientes “quien la hace, la paga”. Vamos a ver si se la aplican a Samantha, y de paso a Barnola Ochoa y Zulema, que como canta Luis Miguel, es su incondicional.
CON QUE destituyan a los últimos dos, las mujeres privadas de su libertad se dan por satisfechas.
Y QUÉ NECESIDAD de que la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Aguascalientes les ande marcando el paso, o que la CNDH les emita recomendaciones, cuando lo único que tienen que hacer es su trabajo.
ESO PASA cuando se ocupan cargos por tener “padrinos” y no por capacidad. (BDR).