Fiscalía Archivó una Carpeta por Amenazas Desde Ceresos

Por Benny Díaz

Imagen relativa a la nota.

Mariana Ávila Montejano

Mariana Ávila Montejano, directora del Observatorio de Violencia Social y de Género, es víctima de hechos sistematizados que ponen en riesgo su integridad y la de su círculo cercano. Por ello, se emiten alertas desde el OVSG. Ante esta situación, tanto el fiscal Manuel Alonso García como diputadas que se dicen defensoras de las mujeres, afirmaron que la activista “no pone denuncias ni se acerca para ayudarla”.

En respuesta, la reconocida activista declaró a esta Casa Editorial: “Debo comentar que tengo dos años dentro del mecanismo de protección de defensoras de derechos humanos y periodistas a nivel federal, y este mecanismo se renueva cada año, en donde se hace una revisión de seguridad y se les envía a las autoridades de los tres niveles de gobierno un oficio en donde las medidas de protección se amplían.

“Es decir, en este momento yo tengo medidas de protección hasta octubre de 2026 porque escuchaba que alguien decía que yo no tenía medidas de protección, y esas medidas están notificadas en el municipio, en el estado y a nivel federal.

“Es decir, a mí me están dando rondines y a mi domicilio llegan elementos de la Guardia Nacional, de la policía estatal y de la policía municipal. Hasta el momento he presentado tres denuncias, no he tenido avances. Bueno, la primera se archivó, porque me comentaron que las amenazas de muerte, de desaparecerme y de dejarme en diferentes partes del estado vinieron de  Ceresos y que se archivaba esa carpeta, y de las otras dos, siguen sin avanzar.

“Entonces es una realidad que yo podría estar todas las semanas presentando denuncias, pero lanzamos las alertas porque ellos ya tienen una obligación, por lo menos hasta octubre de 2026, de procurar mi seguridad, tenga o no otra denuncia, porque ya hay y no avanzan.

“El mecanismo de protección a defensoras de derechos humanos está activo para mí, y creo que hablaron desde el desconocimiento. Les invito de nuevo a que sean muy responsables las autoridades, porque estamos hablando de defensoras de derechos humanos, y que tengo de alguna manera un trabajo de documentación y de sistematización en Aguascalientes que ha implicado que no solamente yo, sino todo el equipo. pudiera estar en riesgo por este tipo de afirmaciones de parte de la autoridad”.

El acompañamiento a casos tan sensibles como desaparición forzada, tortura, violencia laboral y sexual que viven mujeres en diversas instancias estatales y federales es lo que ha llevado a esta situación de acoso contra el OVSG.

“Nosotras sabemos que nos pone en una  situación de riesgo, que habrá quien piense que estamos de alguna manera enfrentándonos con la delincuencia organizada.

Nosotras decimos claramente que nuestro diálogo es con las autoridades, porque nosotras, igual que las familias, no vamos a tener ningún tipo de relación con la delincuencia organizada ni para pedirles nada. No sabemos ni quiénes son, ni qué grupos son, ni dónde están moviéndose, no nos interesa. Lo que nos interesa es que la autoridad garantice las condiciones de seguridad.

“Y sí sabemos que implica un riesgo, porque siempre decir lo que está sucediendo y que lo que nosotras estamos diciendo fue a contradecir otras manifestaciones, otras autoridades, otras voces, puede implicar, por supuesto, un malestar.

“El Observatorio acompaña más de 100 procesos penales que involucran mayoritariamente a personas que están relacionadas con algún grupo de poder, ya sea político, inmobiliario, de fuerza como policías, militares… o sea, casi todos los casos que acompaña el Observatorio son aquellos que no acompañaron en otros espacios o que ya tocaron todas las puertas.

“Y bueno, también recordar que el Observatorio es un espacio gratuito de defensoras de derechos humanos, y decir que hacemos la exigencia para la protección de todas las personas, de todas las familias a las que acompañamos y de todo el equipo del Observatorio. En este momento he sido blanco de agresiones, y sabemos que el malestar es con todo el equipo, y la autoridad tiene la obligación de protegernos a todas”.