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Varios participantes iban en tacones y vestidos cortos y llamativos, pero la gran mayoría marchó con ropa casual y cómoda, mostrando cartulinas con leyendas en donde hicieron visible su amor por quienes decidieron tener como pareja

La Inoportuna Lluvia…

…HIZO QUE la fiesta de la llamada Marcha del Orgullo no fuera tan espectacular como se esperaba.

Y ES QUE, aunque hubo quienes llevaban paraguas, no fue suficiente para aguantar el chubasco que cayó, lo que llevó a algunos a optar por irse y no ver el espectáculo artístico que se presentó.

ESTA VEZ los gritos fueron de orgullo por ser homosexuales, y también andaban por ahí algunas feministas para insistir que, en algún momento, toda América Latina será feminista.

PERO FUE el día de las lentejuelas, los tacones altos, la ropa estrafalaria y las pestañas exageradamente largas.

NO TODOS, pero hubo quienes optaron por expresarse de esa manera, mientras que otros se limitaron a marchar y gritar que el amor es amor, sin importar si es entre hombres, mujeres, personas transexuales o como cada quien se asuma, que cualquier amor es válido, siempre y cuando sea consensuado.

EFRAÍN GONZÁLEZ Muro espera que llegue un momento en el que, al marchar, no haya divisiones entre homosexuales, lesbianas o cualquier otra identidad, porque eso beneficia a los de la ultraderecha, que nomás ni los ven, ni los oyen y mucho menos aceptan que tienen derechos. (BDR).