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Itzel Morán González (Foto: captura de video)

Monólogo…

ES MUY diferente a una rueda de prensa y eso de dar “introducción” de más de 10 minutos, aún cuando el reportero llegue tarde no viene al caso.

Y UN REPORTERO tiene varios eventos que cubrir en un día, no es exclusivo de uno sólo y menos para escuchar dónde estudiaron, las aventuras de su niñez y el coraje que en su adultez no pueden gestionar con la madurez que debe de ser. El trabajo de un periodista que se precie de serlo es preguntar.

TAMBIÉN A una conferencia de prensa se invita a reporteros, no acarreados. Esas reuniones se realizan aparte, si sólo van a hablar un determinado número de personas, los demás sobran.

ITZEL MORÁN González fue a estudiar hasta Buenos Aires, pero mínimo que lea lo básico de reglas de educación y urbanidad.

Y LOS REPORTEROS no tienen el tiempo que a ella se le ocurra para conocer su currículum y tampoco dueña del tiempo de las personas.

CON RAZÓN que Alejandro Vázquez Zúñiga dice desconocer cuál es el verdadero conflicto que se traen ese grupito que asegura que no es la nostalgia, ni el dinero lo que los mueve en el interés de andar en la grilla y ponen como pretexto la escuela de música Manuel M. Ponce, si durante tres horas escuchó lo que tenían que decir y en su cara jamás hablaron de estrés, ni le hablaron de su currículum y que fueron a estudiar a Argentina, que fue de contratos y horas clase y luego de tres horas, en teoría, llegaron a acuerdos.

ESTUDIAR EN el extranjero no es sinónimo de cultura y civilidad, y esas asambleas camufladas de “conferencia de prensa” tiene un tufo, y muy fuerte, a algo muy, pero muy podrido; y por su actuar, a Itzel no le alcanza para tanto. La pregunta, y por el actuar de la manada que se reunió en esa casa de la calle Talamantes, es ¿quién es la mano que mece la cuna? (BDR).