Activistas, de Momento, Logran Frenar el Ecocidio
* Acusan al Municipio de Cambiar el uso de Suelo Para Autorizar la Tala
Por Benny Díaz

Activistas se unen para detener el ecocidio y llaman a la ciudadanía a unirse
Activistas de diferentes colectivos, especialmente Salvemos a La Pona, dirigido por Sofía González, han luchado durante años e interpuesto amparos para proteger ese espacio, considerado uno de los “pulmones” de la ciudad.
Nuevamente se enfrentan a las autoridades que “no han garantizado la protección de estos espacios”, ya que los dueños llevaron maquinaria pesada para tumbar mezquites y huizaches con el fin de “abrir” el espacio y construir una avenida que conecte con Segundo Anillo. Esto ocurrió después de que se “perdió” el juicio y se sobreseyó, dando por terminado el caso.
Sin embargo, lo alarmante es que “el Municipio de Aguascalientes cambió el uso de suelo, siendo que a ellos no les corresponde”, mencionaron las activistas de Salvemos a La Pona. Ante el ecocidio que se estaba perpetrando en ese bosque, el Observatorio de Violencia Social y de Género se unió a la causa y ya está brindando acompañamiento en este caso, que afecta a todos los aguascalentenses.
La Pona es uno de los pocos espacios que quedan para recargar el acuífero, pero por “intereses económicos” pretenden acabar con este espacio natural “en una ciudad con alto estrés hídrico”.
Las activistas formaron una cadena humana para impedir que continuara la tala de árboles “que no son de tres personas, no son de esas personas de Monterrey que son los dueños y que, cuando se nos acabe el agua, no van a estar aquí. Tampoco es de la gobernadora, quien en 2018 acordó con ellos la venta de este lugar, ni de Leonardo Montañez Castro, quien es cómplice de todo esto”.
Desesperadas, las activistas hicieron un llamado a la población para cuidar La Pona y evitar “madruguetes”.
A pesar de que se sobreseyó el juicio, tampoco hubo razón para ello, ya que se debe permitir que los amparos sigan todo el tiempo necesario y revisar “que las condiciones climáticas no son las mismas de hace 20 o 30 años”, declaró a esta Casa Editorial en entrevista telefónica Mariana Ávila Montejano, directora del Observatorio de Violencia Social y de Género.
Hasta el cierre de esta edición, las activistas permanecían en La Pona “resguardando” el lugar y vigilando para evitar que, ya sea de noche o de madrugada, lleguen aquellos que buscan acabar con lo que pertenece a los aguascalentenses. Este espacio es de lo poco que queda para garantizar el agua y mantener este pulmón de la ciudad como un lugar protegido. En La Pona se pretenden construir viviendas, a pesar de que Aguascalientes enfrenta una grave escasez de agua.
El propio Leonardo Montañez Castro ha declarado reiteradamente que se están perforando pozos a más de 400 metros de profundidad.

Las máquinas derribaron árboles
“Las autoridades no han garantizado la protección de estos espacios, porque claro que pueden hacerlo. Se puede realizar la protección de espacios fundamentales para el bienestar de la población y para el bienestar de la ciudad, porque recordemos que es un pulmón, de los últimos pulmones que tenemos en Aguascalientes dentro de la ciudad.
“Hay una responsabilidad, no solamente para frenar esto que pasó y para frenar que no siga sucediendo, sino también para identificar cómo es que se dan estos permisos para construcciones.
Si bien, viene de un proceso de las compañeras activistas de muchos años y de diferentes grupos de dentro del activismo ambientalista, el Observatorio está empezando a acompañar y es muy importante reconocer este trabajo y mencionar que las nuevas generaciones y los grupos que hoy están en defensa de que se pare esta barbarie, les están diciendo que esto fue algo que ya se negoció.
“La autoridades deben responden qué es lo que está sucediendo para que se autoricen permisos que permiten ecocidios. Las personas que son dueñas de esa propiedad pueden hacer cosas, pero a pesar de eso, se tienen que hacer otros trámites y no sólo porque les entreguen la escritura y les digan que ganaron ya queda ahí.
Debe de haber una revisión y de nuevo revisión tras revisión, las veces que sea necesario porque el impacto ambiental que va a tener esta construcción de una obra no se puede hacer porque el impacto ambiental que genera no es la misma hoy que como estaba hace 20 años”.
Mariana Ávila resaltó que se logró detener por el momento el ecocidio y se realizarán mesas de diálogo con diferentes grupos a nivel local y nacional y “por supuesto, la organización que lidera esto, que es Salvemos a La Pona, ha hecho acciones muy específicas y no solamente desde el activismo, también en lo jurídico y como Observatorio nos vamos a sumar en todo lo que sea necesario para la defensa de este espacio que es fundamental para la vida, no sólo la humana, también para esta ciudad”.
“Es un Ecocidio” Por su parte, integrantes de Salvemos a La Pona manifestaron que lo realizado por los gobiernos panistas no se va a quedar así y que llegará tiempo de elecciones y entonces es cuando la ciudadanía, que es consciente de que Aguascalientes le pertenece a la gente y no a quienes están en el poder, pasará la factura.
“No es la Ciudad de tu Vida, es un ecocidio y nos pretenden dejar sin agua por servir a intereses de algunos que tienen mucho dinero, pero nosotros estamos aquí, es nuestra agua, son nuestros mezquites, nuestros huizaches y los vamos a defender”, sentenciaron.
Llaman a Defender a La Pona Salvemos a La Pona llamó a la población, a través de las redes sociales, a unirse a la defensa de ese espacio natural y vital: “¡La Pona está en peligro! “Maquinaria entró a desmontar vegetación nativa.
Vecinos y activistas detuvieron la tala.
Exigimos la protección total de este pulmón verde.
“¿Cómo ayudar? Difunde esta información.
Únete a las jornadas de vigilancia y acampada (¡hasta el lunes!).
“¡Defendamos La Pona!”