El más Reciente, Perpetrado en el Cereso Femenil
Por Benny Díaz

Mariana Ávila Montejano
La activista Mariana Ávila Montejano ha sido intimidada debido al apoyo y acompañamiento que brinda a víctimas de violencia y violación de derechos humanos desde el Observatorio de Violencia Social y de Género (OVSG). Estas situaciones anormales ponen en riesgo su integridad, por lo que se han hecho públicas.
Desde hace meses, Mariana y su círculo cercano han experimentado eventos “extraños”, desde intentos de daños a la propiedad privada hasta supuestos “accidentes” que han causado pérdidas materiales significativas. Cada uno de estos actos ha sido documentado por el OVSG.
La más reciente preocupación de Mariana, presidenta del OVSG, es que ahora no sólo teme por su seguridad y la de su círculo cercano, sino también por la de quienes la acompañan en el activismo y por las personas privadas de su libertad en el Cereso Femenil, a quienes ha brindado apoyo en casos de violaciones a sus derechos, tortura y otras irregularidades que han salido a la luz, poniendo en evidencia no sólo a la Fiscalía del Estado de Aguascalientes, sino también a otras autoridades, como las penitenciarias.
“En los últimos días se ha atentado contra la seguridad e integridad física y emocional de Mariana; el contexto ya se encuentra documentado y será abordado con los organismos correspondientes. Sin embargo, manifestamos y hacemos responsable al Cereso Femenil de Aguascalientes por cualquier acto de represalia o silenciamiento en contra de Mariana, de cualquier integrante de esta organización y de cualquier mujer privada de su libertad”, se lee en la alerta emitida por el OVSG.
“Como organización de defensoras de derechos humanos, conocemos los mecanismos que utilizan tanto los agresores como el Estado para deslegitimar, desacreditar, desmovilizar y desaparecer las voces disidentes que cuestionan al sistema. Por ello, les decimos que estamos activando todos los mecanismos a nivel estatal y nacional para salvaguardar su integridad y que no desistiremos; toda agresión tendrá respuesta”.
Mariana Ávila Montejano es quien aparece en los medios de comunicación como presidenta del OVSG, pero detrás de ella hay un grupo comprometido de hombres y mujeres que trabajan en el activismo para defender a las víctimas. Los casos que se atienden son muy sensibles y, antes de hacerlos públicos, se sigue un protocolo exhaustivo para agotar todas las instancias.
El equipo jurídico del OVSG revisa las carpetas de investigación para asegurarse de que no haya errores que vulneren los derechos de las personas a quienes se ayuda en el proceso, donde no solo enfrentan a los victimarios, sino también, en ocasiones, al sistema.