Sicario le Disparó a Quemarropa
Ángel “N” “N”, de entre 35 y 40 años, recibió dos disparos, uno en la cabeza
De dos tiros, uno en la cabeza, fue ejecutado un narquillo y adicto a las drogas, en la Línea Verde, en el fraccionamiento Villas de Nuestra Señora de la Asunción.
Se trata de Ángel “N” “N”, de entre 35 y 40 años, el cual contaba con múltiples detenciones por faltas administrativas y posesión de drogas, informó en el lugar de los hechos el secretario de Seguridad Pública Municipal, Antonio Martínez Romo.
Alrededor de la una de la tarde de ayer miércoles, el hoy occiso caminaba en la trotapista de la Línea Verde, paralela a la avenida Poliducto.
Antes de llegar al cruce con la avenida Valle de los Romero, en el sector San Marcos, se detuvo una motocicleta Vento roja, modelo 2024, sin placa, con dos sicarios a bordo.
Uno descendió y caminó hasta llegar con Ángel, a quien le disparó a quemarropa, para luego correr y subir a la moto, arrancando el conductor toda velocidad, rumbo “a la avenida Gerónimo de la Cueva”.
A los pocos minutos arribaron policías y paramédicos municipales, quienes confirmaron la muerte de Ángel, que recibió un disparo en la cabeza y otro en el hemitórax izquierdo. Además, los oficiales encontraron dos casquillos percutidos de balas calibre .45, y acordonaron la zona.
Con las características de los criminales, los uniformados implementaron un operativo de búsqueda, pero no los detuvieron: “Estamos checando las cámaras para localizarlos”, señaló Martínez Romo en el sitio.
Asimismo, el jefe policiaco dijo que sobre la avenida Siglo XXI, cruce con Prolongación Adoratrices, en VNSA, encontraron abandonada la motocicleta que utilizaron los sicarios, la cual contaba con reporte de robo.
Asimismo, sobre la calle Pames, esquina con Barrio de Triana, a varias cuadras de la ejecución, los policías del Grupo Centauro localizaron la pistola escuadra que habría usado el asesino.
Mientras que sobre una terracería que conduce de VNSA al fraccionamiento Montebello de la Stanza, hallaron varias prendas de vestir, presumiendo que tras deshacerse de la moto y del arma, tiraron la ropa que llevaban puesta al momento del asesinato.
