Sufre el Bolsillo
LOS QUE andan felices de la vida son fotógrafos, vendedores de flores, globos y cuanta cosa se les ocurre para los que terminaron un ciclo escolar y les hacen fiesta si pasaron de grado: de preescolar a primaria, de primaria a secundaria y así sucesivamente.
PERO LOS que ya empiezan a “temblar” son los padres de familia, quienes desde ya tienen que hacer sus ahorros para poder sufragar los gastos que generan que sus hijos inicien el nuevo ciclo escolar.
PORQUE ESO sí, antes de irse les dieron la respectiva lista de útiles para cuando regresen a clases y los que se frotan las manos son los de las papelerías.
TAMBIÉN QUIENES confeccionan y venden los uniformes escolares, porque hay quienes los deben de comprar por nuevo ingreso o porque se desgastaron, total que sin ser Feria de San Marcos, los “chorros de dinero” vuelven a fluir.
Y ES QUE no es sólo cuadernos, colores y lápices, sino que también las escuelas incluyen en las interminables listas de útiles rollos de papel y hasta productos de limpieza, que porque eso les corresponde a los padres de familia.
YA DE ZAPATOS, tenis, suéteres y demás, ni hablar, porque con eso de que cada escuela tiene su proveedor, Dios guarde la hora donde a los padres de familia se les ocurra, por ejemplo, comprar la tela y confeccionarlo porque “hay controles de calidad”.
Y PENSAR que todavía presumen que la educación (en las aulas) es “gratuita”. (BDR).