Fotografía relevante a la nota.

Carlos Lozano de la Torre
…el enterrador 1…
Alejandro Moreno Cárdenas
…el enterrador 2…
Dra. Blanca Alicia Mendoza Vera
…que se re$i$te a hacer su chamba…

UNA, DOS Y… ¡TRES! ¡COMENZAMOS!
“UN RARO PARECIDO”…

Alejandro Moreno Cárdenas “Ali­to” y Carlos Lozano de la Torre, tienen algo en común: Carlos Loza­no enterró al PRI local y Alejandro Moreno lo hizo a nivel nacional, pudi­endo más sus intereses personales que el bien del institucional partido y, co­incidentemente, un mismo destinatar­io: el PAN.

Carlos prefirió entregar la gubernat­ura al “hijo de la chingada de Martín Orozco Sandoval, quien me robó la alcaldía de Aguascalientes”, a cambio de impunidad, que hacer equipo con su correligionaria, Lorena Martínez Rodríguez, candidata del PRI a la gu­bernatura de Aguascalientes, creyen­do que Lorena estaría tentada a me­terlo a la cárcel por tanto que robó, y la jugada le salió bien porque Martín cumplió a cabalidad su palabra y no lo tocó ni siquiera con él pétalo de una comparecencia.

Aquí Martín no fue como Carlos, que persiguió perrunamente a su ante­cesor Luis Armando Reynoso Femat, como “pago” por haberle entregado la gubernatura en bandeja no de plata, si­no de oro, oro de 24 quilates.

Mientras que “Alito” se vistió de im­punidad haciendo acuerdos con AM­LO, primero, vía Ricardo Monre­al, luego con el PAN por conducto de Marko Cortés, librando, hasta hoy, la ley y el decomiso de lo mucho que robó y sigue robando.

Pero bueno, aquí tiene el lector a los dos enterradores del PRI a cual más de corruptos, ¿qué les pasará cuándo la raza de bronce, ponga sobre ese ataúd, el último puño de tierra, que podría darse el próximo domingo 2 de junio?

NO HAY PLAZO QUE NO SE CUMPLA…

Y este domingo 2 de junio, México tendrá su primera mujer presidente, y si las encuestas no fallan, esa mujer no es otra que Claudia Sheinbaum Par­do: así está cantada, pero… habrá que esperar que lo confirmen las boletas electorales.

Mientras tanto, Xóchitl llora la der­rota del Cruz Azul: las águilas pic­otearon el cemento que no fraguó y la cimbra se vino abajo estrepitosamente y hasta un vecino, amigo mío, de “ini­ciales” Mario Granados Roldán, estuvo al borde del suicidio: la mal­dición perdura… Cruz Azul, está des­tinado a no ganar un campeonato por lo que resta del siglo, snifff, snifff, snifff…

“MÍ NO ENTENDER”, DIJO EL GRINGO…

Mientras que las autoridades todas, invitan a la raza de bronce no sólo a plantar un árbol si no a cuidarlo y has­ta organizan programas de forestación, otras como los titulares de Proespa y la Profepa, les vale queso y a cambio de un billetillo se hacen los occisos y permiten la desforestación.

Así sucedió en Jaltomate, en donde un tal Pedro González, dueño de una mezquitera, decidió comenzar a ta­lar añosos árboles a ley de sus cal­zones, seguramente para fraccionar o hacer algún otro pingüe negocio, aprovechando que su predio está cerca de la carretera.

Fotografía relevante a la nota.

Héctor Eduardo Anaya Pérez
… pue$ de a cómo fue el billete?..
Clara Luz Flores Carrales
…”nomás no funciona”…
Jaqueline Gálvez Ruiz
…80 años de prisión…

Viendo tan escandaloso ecocidio, lu­gareños hicieron causa común y se apersonaron con los propietarios lo­cales de Proespa (Procuraduría Es­tatal de Protección al Ambiente) y Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente), que son los encargados de cuidar el medioam­biente; pero los dueños locales de es­os membretes, ni los ven, ni los oyen, ¿por qué? Seguramente porque, como se acostumbra, les dieron su mochada para hacerse güeyes.

Sépanlo usted, el güey, perdón, el dueño de la Proespa es Héctor Edu­ardo Anaya Pérez; y la güey, perdón otra vez, la propietaria de la Profepa es Blanca Alicia Mendoza Vera.

Bueno, pues aquí los indigna­dos señores de Jaltomate ya saben a quiénes, cuando menos, mentarles a su jefecita o, de plano, demandarlos por la vía penal, pues ya estuvo suave de tan­ta corrupción, porque están para pro­teger el ambiente, no para degradarlo, ¿no cree el lector?

LOS CHINGONES SOMOS NOSOTROS, ATENTAMENTE: MANUEL ALONSO…

Pues ahora resultó que, como dice Xóchitl Gálvez, Manuel Alonso García, que cobra como propietario de la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSPE), los monitos del Siste­ma Nacional de Seguridad Pública, cuya titular es Clara Luz Flores Car­rales, son re’güeyes, y nosotros los chingones; y es que el Manolo asegu­ra que sus yerros son culpa de Clara Luz y sus muchachos “porque no tienen metodología objetiva, ni bue­na estadística para clasificar los deli­tos, porque entre más trabajo hacien­do cateos y deteniendo personas, más aumenta el narcomenudeo (sic), por eso creo que no hay que irnos por ahí (resic)”, fue la respuesta que Manolo dio a los reporteros, al enterarse de que Morena lo sacó a balcón al declarar que Aguascalientes se encuentra, a niv­el nacional, en los primeros lugares de robo a casa habitación, de automóviles, transeúntes y narcomenudeo.

Y Manolo subrayó: en otros estados se cometen los robos con violencia, en Aguascalientes no, pero eso no lo di­cen; y por pretextos el poblano no para: “Lo que sucede es que hay fiscalías de otros estados que lamentablemente no reportan y, por lo tanto, no tienen infor­mación veraz, lo hemos visto en las es­tadísticas de estados como Veracruz y la misma Ciudad de México, en donde hay más robos, pero como no reportan bien, tienen cifras inverosímiles”.

Entonces, para Manolo así está la pichada: “si Aguascalientes está mal, el resto del país está peor, sólo que los otros estados rasuran los delitos y no­sotros no”, he ahí el meollo del asunto, según el de Puebla.

Mientras el narco sigue ganando ter­reno, ejecutando a cinco en un día y colocando por todos lados narcoman­tas amenazadoras, y anunciando el re­surgimiento de “La Oficina”, en unión con el Cártel de Sinaloa, grupo que tanto alardeó haber extinguido “El Torturador de Aguascalientes”, Fe­lipe de Jesús Muñoz Vázquez, hoy uña y mugre del locutor José Luis “La Víbora” Morales.

¡Cuidado!

DESBANDADA DE NARCOS…

Aguascalientes, el corazón de la República es un oasis en comparación con los estados vecinos que nos rode­an: Jalisco, Zacatecas y San Luis Po tosí; sobre todo los dos primeros, cuyos cárteles están aumentando aquí su pres­encia: CJNG y CS-La Oficina, por lo que Manolo debe de ponerse a traba­jar en serio, apoyándose en la Guar­dia Nacional y el Ejército Mexicano, pues sería terrible que nos convirtiéra­mos en un Jalisco, un Zacatecas o re­gresáramos al terror que imperó cuan­do Felipe de Jesús Muñoz Vázquez y el general Rolando Eugenio Hidal­go Eddy, se acusaban de narcos uno al otro, mientras el esquizofrénico Felipe llenaba las cárceles de gente inocente en su loco afán de taparle el ojo al ma­cho, y fabricando culpables a base de torturas, para simular estar trabajan­do, mientras protegía al cártel de sus preferencia$.

No, nadie quiere que Aguascalientes regrese al pasado, pero tampoco que seamos un Jalisco, un Zacatecas, en donde ya comenzaron a apretar unos tornillos que por ahí andaban sueltos y no vaya a ser la de malas que suceda el efecto cucaracha y nos invadan, ya nos están dando un botón de muestra: ¡cin­co ejecuciones en un día!

¡Cuidado!

UNA BUENA NOTICIA…

En estos tiempos aciagos para muchos estados de la República, Aguascalien­tes viene siendo un estado imán pa­ra las inversiones, y ayer la goberna­dora Tere Jiménez Esquivel, anunció que una nueva empresa china: Ningbo FengMei New Energy Automotive Technology Co. Ltd., de automóviles eléctricos, llega a Aguascalientes, con una inversión de 15.6 millones de dólares.

Fotografía relevante a la nota.

Tere Jiménez Esquivel
…siguen llegando inversiones…
Manuel Alonso García
…cuidado con el narco…

Mención aparte merece la revelación de que se están haciendo pruebas pa­ra modernizar el transporte urbano, que será eléctrico para entrar de lleno a la modernidad. Vientos huracanados.

PERO…

Reitero: Manolo debe dejarse de boberías y ponerse almeja con el nar­co, los tiempos del “Torturador de Aguascalientes”, cuando ejecutaron y descuartizaron a sus narcosobrinos y metieron sus cabezas en hieleras después de torturarlos, matarlos y des­cuartizarlos, no deben de regresar.

¡Cuidado!

Y CON ESTA ME DESPIDO…
UNA HISTORIA DE TERROR: PEDRO MIGUEL…

“La justicia mexicana pidió la pena máxima, que puede rebasar 80 años de cárcel, contra Malinali Gálvez Ruiz, acusada de privación ilegal de la lib­ertad, asociación delictuosa y posesión de armas reservadas para uso exclusivo del Ejército, y quien es hermana de la candidata opositora a la Presidencia de la República, Xóchitl Gálvez.

“El documento de la investigación, que habla de un hecho delictuoso ocur­rido hace más de una década –el se­cuestro de Marcela Patricia Flores Domínguez y Rodolfo Morales Hernández–, contiene las declara­ciones de víctimas y testigos presen­tados durante el juicio de Malina­li Gálvez, el cual concluyó en febrero pasado.

“Según consta en los papeles entre­gados, la participación de la herma­na de la abanderada de PAN, PRI y PRD en la banda de secuestra­dores Los Tolmex consistía en pon­er a personas conocidas en manos de los otros participantes en el pla­gio. La banda se caracterizaba por su alto grado de peligrosidad. Según alegatos del Ministerio Público Federal, operaban mutilando a sus víctimas, de quienes tomaban videos y grababan voces que enviaban a sus familiares con el fin de conseguir res­cates millonarios.

“El secuestro que llevo a la cárcel a la hermana de Xóchitl Gálvez se per­petró el 22 de mayo de 2012. Empezó con una cita en la que Malinali acordó encontrarse con Marcela Patricia Flores en la esquina de Prado Norte y Paseo de la Reforma.

“A la llegada de Patricia, que iba acompañada por su chofer, Rodolfo Morales Hernández, Malinali sub­ió al vehículo de Patricia y les pidió que siguieran una camioneta Mitsubi­shi conducida por José Alberto Rive­ro (El Albert), pareja sentimental de la hermana de la política hidalguense. La promesa era que se encontrarían con Xóchitl Gálvez, entonces diputada por el PAN.

El Albert era un taxista que según sus declaraciones se reencontró con Malinali. ‘A finales del mes de agos­to (2011) nos fuimos a vivir juntos. El mes de enero vendí el taxi y el mes de marzo entré a trabajar a HAITECC (Hightech Services, empresa que per­tenece a Xóchitl Gálvez), que es una constructora, y mi labor era realizar análisis de trabajos, me los enviaban en CD o disquete y yo los regresaba, y ya me daban dinero o yo iba por él a la casa del director de esa empresa, quien aún es el esposo de Malinali, pues no se han divorciado’. El Albert ya vivía con La Malí, nombre que le daban a la hermana de Xóchitl.

EL HORROR…

“Las camionetas llegaron a una ca­sa donde se suponía que había una re­unión, y ahí fueron privados de la lib­ertad. Los secuestradores exigían 20 millones de pesos en el inicio y redu­jeron sus exigencias primero a 10 mil­lones y al final sólo lograron 2 millones 400 mil, más alhajas.

“Durante las negociaciones, la hija de la víctima, Laura Olmedo Flores, re­cibió un mensaje de texto de La Malí en el que le decía: ‘Lau, buenos días. Oye, he tratado de localizar a tu mamá pero no he tenido suerte, le marco a su cel y no entran; quería avisarle del de­sayuno con mi hermana Xóchitl, Jose­fina y la Wallace el sábado, pero no he tenido éxito. Dile que me llame’.

“Hubo una segunda llamada en la que de la misma forma, La Malí se extraña­ba porque no había recibido llama­das de la que en esos momentos era su víctima. Las llamadas fueron consid­eradas atípicas por la familia, y señalan a la hidalguense como sospechosa, pe­ro el 22 de junio de 2012 se realizó el pago de los 2 millones y se inició con ello el seguimiento de La Malí por parte de los servicios de inteligencia de la Policía Federal.

“Una denuncia anónima informa de movimientos extraños en una casa en Toluca, Estado de México, adonde habían trasladado a las víctimas y de donde fueron rescatadas. Al momento de la detención, en la sala del inmue­ble fue encontrada Jaqueline Malinali Gálvez Ruiz.

“Llevaba consigo una mochila con un celular, un iPod, nueve chips de las compañías Telcel y Movistar, 88 car­tuchos útiles de diferentes calibres y llaves de diferentes vehículos.

“En una habitación adyacente se en­contraban dos personas en cautive­rio dentro de una jaula de aproxima­damente 2 metros de largo y 1.50 de ancho. La jaula estaba cubierta por co­bijas y dentro de ellas estaban Patri­cia Flores Domínguez y Rodolfo Mo­rales Hernández.

“El juicio terminó, y se espera que en breve ya se dé la sentencia contra la banda de Los Tolmex, en la que partic­ipaba Malinali Gálvez Ruiz”.

* (Columna publicada inicialmente en el semanario hermano TRIBUNA LIBRE el pasado jueves 30).