La Columna del Diablito

UNA, DOS Y… ¡TRES! ¡COMENZAMOS!
A GRITOS…

Policías de todos los niveles ya no aguantan a su “Poroso” jefe, que busca no imponerse con la razón, sino a gri­tos e insultos, muy al estilo del extinto general Rolando Eugenio Hidalgo Eddy; la raza se refiere al poblano Manuel Alonso García, secretario de Seguridad Pública Estatal, que presu­me maestrías y doctorados en su ramo, que no le sirven pa’maldita la cosa, pues él mismo ha hecho público su “porosidad”, por el cual es conocido como “El Poroso”.

¿Por qué será que los jefes policia­cos, llamados en la actualidad pom­posamente secretarios de Seguridad Pública, se creen generales y que sus subordinados son su tropa?

Pero no sólo es con su “tropa” con los que “El Poroso” se comporta ojéis y cuyeyo, sino con jefes de otros cargos “inferiores” a él, o quienes ve como Dios a los conejos: chiquitos y orejones.

Recuerdo al extinto general Rolando Eugenio Hidalgo Eddy, secretario de Seguridad Pública en los gobiernos de Luis Armando Reynoso Femat y Carlos Lozano de la Torre.

Luis Armando confió mucho en el general Hidalgo, pues su secretario anterior le salió muy mañoso, tan mañoso que del Centro le ordenaron al llamado “Señor de los Rayos” que le diera puerta, aire, o séase que lo co­rriera, pues andaba metido en la maña, por lo que Luis Armando no tuvo otra opción más que acatar órdenes supe­riores, de lo contrario ambos saldrían raspados.

Llegó pues el general Hidalgo en lugar del traidor a la patria y, al ver que tenía apantallado al góber, el militar se creyó don chingón y hasta se puso al tú por tú con el entonces secretario de general de Gobierno, Juanín Pérez Talamantes, quien en una entrevista en Palacio de Gobierno, no sólo le gri­toneó, sino que golpeó con tal fuerza el escritorio de Juanín, que el general sufrió fractura del dedo chiquito (no es albur); ahí el general reconoció que la había cajeteado y le bajó de huevos, no obstante traía fintos a los procuradores generales de justicia, que salían del cargo uno tras otro, pues la verdad no rendían.

Termina su administración Luis Armando y llega Carlos Lozano de la Torre, con su propio chamuco: Felipe de Jesús Muñoz Vázquez, a quien nombró procurador general de Justicia, a pesar de su negro historial (él fue quien alertó al narcogobernador Mario Ernesto Villanueva Madrid “El Chueco”, que policías federales, habían salido del Distrito Federal, para aprehenderlo en cuanto entregara la gubernatura a su sucesor Joaquín Hendricks Díaz, lo que provocó su huida, aunque posteriormente fue dete­nido), situación que provocó que Feli­pe de Jesús fuera cesado por “pitarra” y a punto estuvieron de darle fresco bote, aunque después, desafortunada­mente, fue perdonado).

Todo comenzó más o menos bien, hasta que el general Hidalgo llega al feudo de Felipe de Jesús y le reclama que a la fecha no le haya entregado su informe mensual y ahí ardió Troya: “Yo soy el procurador general de Jus­ticia y estoy por encima de usted y no tengo que entregarle ningún informe, en todo caso usted me lo debería de entregar a mí”.

Y ahí ambos rompieron lanzas y nació una fuerte rivalidad entre ellos: el ge­neral acusó de narco a Felipe de Jesús y éste al general; Carlos, por su parte, se divertía oyendo a uno y a otro con su pleito verbal y echándose mierda uno a otro, hasta que Carlos se fastidió de escuchar tantas acusaciones y la hebra se rompió por lo más delgado: el ge­neral fue cesado y Felipe se convirtió en “vicegobernador” y metió a bote a quien le dio en gana, bueno, casi.

Luego, entre hicieron crisis las di­ferencia$ y, en un viaje al extranjero del entonces “goberladrón”, Felipe de Jesús le aventó la chamba y comenzó su peregrinar el entonces ya llamado “El Torturador de Aguascalientes”, quien salió por cuerdas de la titularidad de la Procuraduría General de Justicia de Colima, en la que apenas permane­ció escasos ocho meses, luego de que en sendas narcomantas lo acusaban de defender a un cártel contrario.

Ya sin el apoyo de Carlos Lozano de la Torre el camino de Felipe de Jesús Muñoz fue cuesta abajo, regresó a la PGR en varias ocasiones, las mismas que salió con la cola entre las patas, la ultima fue el ultimo día de mayo de 2019, acusado de corrupción y de tener su propia banda de secuestradores, y desde entonces no ha vuelto a agarrar hueso, pues está apestado en el servi­cio público, porque el hombre además de corrupto y traidor es fabricante de delincuente y protector de pillos, ojalá y este pasaje le sirva a Manuel Alonso de reflexión.

Porque esos cargos nomás se ocupan una vez en la vida, luego ya nada es igual; como dice el dicho: “¿pa’qué gritas si la gallina es tuya?”, no se haga odioso con sus subordinados y compa­ñeros de trabajo.

Y otra cosa: la bronca en “El Ruido­so” se pudo haber evitado, si su gente que estaba vigilante en el lugar hubiera sido diligente, pero se arrugó porque la mayoría de los asistentes eran de la maña que habían ocurrido al lugar a escuchar al cantante de narcocorridas “Chicho” Castro, quien temeroso por el conato de bronca tuvo que salir custodiado por guaruras que lo prote­gieron empuñando tremendos cuernos de chivo, listos pa’vomitar fuego, en cualquier momento de apremio, lo que hubiera provocado tremendo baño de sangre, todo por no estar “víboras de cascabel” en ese narco espectáculo.

Moraleja: trate bien a su gente y no busque broncas con otros funciona­rios, a gritos no se arreglan las cosas, tampoco con doctorados sino con in­teligencia.

¡Cuidado!

A propósito: en la monumental de Aguascalientes, se vieron Felipe de Jesús y “La Víbora”, muy sonrien­tes, felices y chinguenguenchones… ¿será?

“¡SÁLVENNOS DE OTROS SEIS AÑOS DE COMUNISMO!…”

La xochitlover Érika Muñoz Vi­drio, admiradora de Pedro Ferriz de Con, hijo del cejudo Pedro Ferriz Santacruz “El Marciano” (+), pidió a los candidatos del PAN ganar las elecciones, porque “los últimos seis años vivimos en el comunismo, y si Morena vuelve a ganar la Presidencia de la República, México será otra Ru­sia, Venezuela o Nicaragua”, expresó la mujer, palabras más, palabras menos, ¡juarjuarjuar, ahora sí que doña Erika Muñoz -con todo respeto- pareciera que se las tronó!

Bueno, hasta don Roberto Díaz Ruiz, hombre sereno y de mucho criterio, se contagió y dijo que en este régimen los transportistas han sufrido pérdidas por 192 mil millones de pesos,”¡en la malle mi general!”, es algo así como el presu­puesto de egresos de Aguascalientes de siete años.

¿Pues cómo a cuántos kilos asciende la fortuna de don Roberto Díaz?, por­que Aguascalientes es de los estados que mueven mucho flete a pesar de ser de los más “chirris”, y si los transpor­tistas perdieron 192 mil millones de pe­sos cuantos kilos perdió don Roberto? Mil, dos mil…

Y mírenlo tan tranquilo hablando de miles de millones de pesos, como si se trataran de cacahuates, lo que quiere decir que don Roberto está bien cuaja­do de billetes, tanto que -reitero- habla de miles de millones de pesos, como si fueran cacahuates.

Y eso que, como dice doña Érika Muñoz Vidrio, “vivimos seis años de comunismo en México”, jiarjiarjiar, ¡que le hagan el antidoping, hay indi­cios de que doña Érika le quema las patas a Judas!

Y HABLANDO DE ELECCIONES…

Aguascalientes siempre ha sido “pa­nadero”, pero… ¡cuidado!, recuerdo que los “triunfos” del PRI eran con enormes trampas y a la brava; en en­trevista con el entonces niño terrible Armando López Campa, “Trampa”, pa’ los cuates, éste confió que en la campaña de Miguel Romo Medina, para la alcaldía de Aguascalientes (1984-1986), le tuvo que inyectar 15 mil votos, para sacarlo avante.

Luego vinieron triunfos de Héctor del Villar, Armando Romero (que pintaba para gallo, pero que se apa­gó al ser obligado a dejar inconclusa su administración por mandato del entonces gobernador Miguel Ángel Barberena Vega, a favor de Ma. Alicia de la Rosa López, ya sabe el lector por qué), Fernando Gómez Esparza “don Julio Regalado”, y luego llegó, por fin, un neopanista a la alcaldía: Alfredo Reyes Velazquez “El Mosco”, quien se desequilibró todito al echarse un clavado en una al­berca sin agua, de lujoso hotel, cuando siendo alcalde electo, cargó con todo y familia a gozar de unas “merecidas” vacaciones, antes de protestar como el primer alcalde panista de la historia, albercazo que perjudicó enormemente su estado mental de por vida.

Luego del “Mosco”, llegaron Luis Armando Reynoso, Ricardo Mag­daleno y Martín Orozco Sandoval, panistas todos, luego el PRI recuperó la presidencia municipal abanderando a Gabriel Arellano Espinosa, quien sufrió un cuartelazo de su compañero de partido, Carlos Lozano de la To­rre, siendo sustituido por Adrian Ven­tura Dávila (+), y luego llegó Lorena Martínez Rodríguez, para después recuperarla el PAN con Juan Antonio Martín del Campo (2014-2016) y desde ahí el PAN no la volvió a soltar, pues Tere Jiménez Esquivel ganó la siguiente y luego repitió color para enseguida dejar la alcaldía en manos de Leo Montañez Castro, quien ahora busca reelegirse el próximo domingo 2 de junio, si la raza de bronce no le juega una mala pasada y lleva a palacio municipal a la expanista Martha Már­quez Alvarado; los momios no favore­cen a Martha, pues el gran favorito es Leo, pero… aunque usted no lo crea, mucha raza fifí del norte de la ciudad, también tiene su tarjeta de bienestar y cada mes, recibe sus billetes “pa’la ga­solina”; entonces si el PAN se duerme en sus laureles…

¡Cuidado, hay muchos güeritos que quieren a Morena!

LOS GÜEVOS AZULES DE XÓCHITL Y TRICOLORES DE ALITO SE UNEN…

No cabe duda de que Xóchitl Gálvez Ruiz, candidata del PRIANRD se equivocó de oficio: debió haber sido comediante, pues es una versión lépera de la India María, y eso le gusta a mucha gente, pero no para la política, sino para reírse: “Soy cabrona y me­dia”, suele decir y “soy una mujer con muchos güevos”, “es lo que le gusta a los hombres, la panocha”, “si tienes 60 años y no tienes un patrimonio estás bien güey”, “mi madre me dijo, no te vayas a Francia, si te vas me muero, y yo le contesté pues muérete”, “de estudiante yo tenía una memoria asom­brosa, me aprendí cual era la capital del mundo y las capitales de los cinco continentes”, “yo soy una mujer muy chingona”, “en mi gobierno, no habrá, ni huevones, ni rateros ni pendejos”, “cuidaré y educaré a tus hijos, como hago con los míos”, “tengo muchos güevos para enfrentar a la delincuen­cia”, “ovarios tengo y muchos”, “hay muy malos priístas que yo no trabajaría con ellos, como Bartlett, como Ali­to…”, “yo creo que sería muy impor­tante preguntarles a las personas que murieron”.

Estas y otras frases chuscas que de momento escapan de mi memoria, hacen desternillarme de risa; pero a muchísima gente no le gustaría otro Vicente Fox, versión femenina que le preguntara a un presidente de equis país, o a un secretario de estado: “¿qué onda?, ¡chido!, ¡con todo!, ¡contenta!, ¡animada!, ¡ya se van los corruptos!, ¡juarjuarjuar!”.

Hombre, habiendo tanta raza fifí que hubiera hecho, sin duda alguna, un mejor papel, como el gobernador de Yucatán, Mauricio Vila Dosal, el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González, Manuel Clouthier Carrillo, el empresario Gustavo de Hoyos, Santiago Creel, entre otros que le darían seriedad a la contienda como también lo haría la priísta Bea­triz Paredes y hasta el higadito hijo de Miguel de la Madrid.

Pero tejieron una historia con una mu­jer ocurrente como ignorante; en fin, todo indica que Xóchitl se quedará en la orilla y Claudia Sheinbaum dirigirá el destino del país los próximos seis años y Morena tiene cantera para los siguientes dos, tres sexenios, siempre y cuando no desmayen con la 4T.

EL NARCOMENUDEO…

Nomás pasó la Feria Internacional de San Marcos y el panorama co­menzó a descomponerse con las ejecu­ciones a causa del narcomenudeo, en los últimos días ha sido tiro por viaje, basta ver TRIBUNA LIBRE roja de los lunes y TRIBUNA LIBRE de los jueves, para enterarse cómo mascan los cárteles de la droga que pelean la plaza: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación.

Los sicarios van tan a la segura que llegan a determinada hora del día a una casa, tocan o echan la puerta abajo y matan al competidor o al “traidor” que cambia de bando.

Es desgarrador ver fotos como hoy publicamos en este espacio, en don­de una madre llora hincada frente al cadáver ensangrentado de su hijo, se le apachurra a uno el corazón, a pesar de que en este oficio se ven estos hechos a diario, ya sea en Za­catecas, Jalisco o Zacatecas, estados en donde esta Casa Editorial cuenta con periódicos.

LOS GÜEVOS AZULES II…

A cómo dé lugar, reitero, el PRIAN­RD quiere, anhela, que Jorge Álvarez Máynez se baje de la contienda electo­ral, y pida a afiliados y simpatizantes de Movimiento Ciudadano (MC), voten por Xóchitl Gálvez, quesque “para salvar a México de las garras del comunismo”, pero Álvarez dice que lo haría si Marko Cortés, Alito, y gente como Ricardo Anaya y Beltrones, en­tre otros, renuncian a la presidencia de sus respectivos partidos y a sus dipu­taciones y senadurías plurinominales.

Quien dijo yo fue el jerarca del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, mejor conocido como “Alito”, no así “Mar­kito” quien mantiene la boca cerrada para que no le entren moscas.

Pero “Alito”, muy al estilo Xóchitl Gálvez, le dice a Álvarez Máynez y compañía, al respecto:

“¿Salieron primero muy varoncitos, ¿no?, y luego les hizo falta ‘carácter’. Hay que decirle a Máynez que si le hacen falta güevos yo le presto, porque hay que defender a México (sic). Esto es por México. Esto no es una borra­chera en un palco de futbol. Esto es el país, hay que defender la libertad, la democracia (resic).

¿Cómo con insultos y presumiendo de muchos güevos, van a convencer a Jorge de declinar a favor de Xóchitl Gálvez?

¡Por favor, no os la jaléis!, lo único que buscan es hacer ruido y que MC ya no le siga arrancando votos a Xóchitl, como se vio en las encuestas de univer­sidades, en la que los estudiantes colo­caron a la prianista en tercer lugar, muy lejos, incluso, de Álvarez Máynez.

Y CON ESTA ME DESPIDO…

Quien se resiste a dejar el “cobro de piso”, es el exdirector de Reglamentos del municipio de la capital del estado, David Ángeles Castañeda, pues el flamante magistrado del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado de Aguascalientes, tenía ahí su mina de oro y quiere a la de a güevo, conser­varla.

¡Cuidado!

* (Columna publicada inicialmente en el semanario hermano TRIBUNA LIBRE el pasado jueves 16).