“Carlos ‘N’ ya Tiene Asignadas Horas Para el Próximo Semestre”

Por Benny Díaz

Fotografía relevante a la nota.

Mariana Ávila Montejano y Violeta Sabás Díaz de León (Foto: Ernesto Martínez Reyes)

Mariana Ávila Montejano y Violeta Sabás Díaz de León, del Observatorio de Violencia Social y de Género (OVSG), ofrecieron una conferencia de prensa para dar a conocer que la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) “es omisa ante la violencia y acoso que hay hacia las alumnas de parte de profesores, porque desde 2017 se documentó el primer caso en donde lo único que hicieron fue despedir al mentor, pero ahora hay uno de nombre Carlos ‘N’. No podemos decir su nombre completo porque se afecta el debido proceso, del que a pesar de tener conocimiento de lo que hace, ya tiene asignadas horas (clase) para el próximo semestre”.

Desde hace seis años el OVSG han dado acompañamiento a las alumnas que han sido víctimas de los profesores y “nos congratulamos de que deciden denunciar ante todas las instancias, pero en la Defensoría de la Universidad no hacen nada a pesar de que tienen conocimiento del caso más reciente”, mencionó Violeta Sabás.

Recordó que “nosotras hemos dado acompañamiento, y en el caso de 2017 se llegó a la vinculación a proceso para el profesor y que ya no pudiera dar clases, pero hay diferentes denuncias de casos que se presentaron en 2018 y 2019; se acercaron con nosotras y las más recientes son alumnas del Centro de las Artes y la Cultura para denunciar a Carlos ‘N’ por el acoso que les hace y la respuesta que les dan es que como es sindicalizado no pueden hacer nada y ellas han sido víctimas constantes de revicitimización institucional, ya que existe un protocolo que se dio justo por lo ocurrido hace seis años. La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Aguascalientes (CDHEA) implementó un protocolo sobre la violencia sexual en las escuelas hacia las y los estudiantes y es necesario que se implemente debido a lo que está sucediendo en la UAA”.

Lo que ocurre con este profesor llamado Carlos y que consta en una carpeta de investigación, es que “una de las alumnas ha recibido agresiones y mala praxis en la materia educativa, y es que no sólo a ella, sino a otras de sus compañeras y compañeros los invita a salir y que tengan un contacto más directo. A las mujeres las está hostigando y les ha solicitado a algunas relacionarse más allá de lo académico, y a pesar de haberlo denunciado, la Universidad no ha querido tomar cartas en el asunto y comentan que la situación es que está el sindicato, que el profesor tiene base y que no lo pueden despedir ni actuar más allá. Las afectadas se han ido a manifestar ante la Defensoría Universitaria y se enteran de que al profesor le han vuelto a dar carga escolar para el siguiente semestre como si no hubiera ocurrido nada”.

Ante esto, las alumnas se contactaron con el OVSG para solicitarles que den a conocer esta situación y “que hagamos un llamado a la UAA en donde se siguen reproduciendo estas prácticas. Estamos denunciando a este profesor para que sea separado de su cargo y se haga la investigación; si resulta responsable se tiene que ir a proceso jurídico porque es una realidad que el acoso sigue existiendo y nos decían estas víctimas que es necesario que la opinión pública se entere de que tienen con esto dos años y no han resuelto sus exigencias y menos han sido escuchadas, por eso hacemos un llamado urgente para que se les dé respuesta y protección”.

Sabás Díaz de León recordó que en el caso de 2017 la UAA lo único que hizo fue correr al profesor en cuestión “y así se lavaron las manos, dijeron que no había nada más qué hacer, y eso es impunidad porque las alumnas siguen viviendo violencias y es recurrente porque hay varios profesores que caen en el hostigamiento”.

Lamentablemente, no sólo ocurre en la UAA, también en otras universidades e incluso hay casos en todos los niveles educativos, desde primaria hasta educación superior. Ante las denuncias los directivos son muy cerrados y lo primero que hacen es tratar de “arreglar las cosas al interior, como los trapitos sucios se lavan en casa y no es así. Hemos ido a instituciones en donde los directores nos dicen que hablaron con el profesor en cuestión y que dicen que la acusación es mentira y que le creen a él, no a la víctima”.

Sólo en una universidad privada respondieron a su llamado y de inmediato tomaron cartas en el asunto y ayudaron a la alumna que fue acosada.

El resto se niega a exponer a quienes abusan de su puesto para violentar a alumnas y alumnos de esa manera, y en la UAA hubo un caso en donde cuatro mujeres estaban a muy poco de terminar su carrera y ante la omisión de la institución dos decidieron darse de baja y a las otras dos se les pusieron demasiadas adversidades para que pudieran graduarse.

Las activistas pidieron a quienes sean víctimas de acoso u hostigamiento que denuncien, incluso hasta por redes sociales y exponerlos en videos, ya que resulta inadmisible que se les siga creyendo a quienes actúan mal y se revictimice a las mujeres o de plano se tengan que aguantar ese tipo de actitudes.