“Tendrá un Costo de 40 Millones de Pesos”

Por Benny Díaz

Fotografía relevante a la nota.

Leonardo Montañez Castro (Foto: Alejandro Ruiz Hernández)

Al relleno sanitario San Nicolás todavía le queda una etapa de vida, pero con mil 300 toneladas de basura diaria, más las 400 toneladas al día que dejará la Feria Nacional de San Marcos, es importante seguir impulsando la cultura de reciclaje para evitar el impacto ambiental que deja el enterrar los desechos, ya que son espacios que irremediablemente contaminan varias capas del subsuelo sin importar que se tomen medidas preventivas.

Así lo expuso en entrevista colectiva el alcalde Leonardo Montañez Castro, quien dio a conocer que la ciudadanía debe de ir adquiriendo la cultura de separar desde casa los desechos, pero también “reutilizar y reciclar todo lo que se pueda. Si algo se descompone, que lo lleven a arreglar y no compren otro artículo nuevo, porque si puede seguir teniendo vida útil ayudan al medio ambiente”.

También ha instruido a la Secretaría de Medio Ambiente para que hagan más atractivos los centros de acopio de reciclaje, y ya sea con una tarjeta electrónica o del tipo que vayan juntando puntos para intercambiarlos por artículos, lleven todo aquello que se puede reciclar como plásticos, cartón y vidrio; además de tener cuidado de llevar a los lugares específicos las pilas que dan energía a algunos aparatos y que, si se tiran a la basura, el líquido que desprenden es altamente contaminante para el subsuelo y el agua.

Dejó claro que los camiones recolectores no “mezclan” los tipos de basura, sino que ya viene así porque las personas no tienen la cultura ni el cuidado de separarla en bolsas diferentes, y por eso “poco a poco vamos a ir trabajando en ciertas colonias donde colocaremos contenedores verdes para que la gente sepa que ahí sólo pueden dejar residuos orgánicos y los que no lo son que se lleven a los centros de acopio porque tendrán un valor agregado”.

La última etapa del relleno San Nicolás tendrá un tiempo de vida “dependiendo de las acciones que tomemos. Estamos ya muy próximos a comenzarla a utilizar y puede servir por cuatro años, pero ya debemos de trabajar en esquemas para ir preparando el nuevo relleno que estará frente al actual y constará de 10 hectáreas”.

Para que esa última etapa del San Nicolás pueda ser útil por cuatro años, “se contará con lagunas auxiliadas por bombas que funcionarán con energías limpias, anteriormente era con pipas pero ya no será así, las bombas mandarán directamente la laguna de oxidación con energía solar y eso reducirá los costos”.

Reconoció que no es sencillo este tema, porque para proteger el medio ambiente se tiene que trabajar mucho con las membranas de la laguna de oxidación y hay que cumplir con la norma oficial mexicana de que llegue al subsuelo para no contaminar el agua, y “se están haciendo las inversiones necesarias para ir compactando y cubriendo las capas cada 50 centímetros, como establece la regla, y se está cumpliendo. En breve vendrá una empresa verificadora para decirnos los avances que se han tenido”.

El costo para que el nuevo relleno sanitario comience a funcionar es de “fácilmente 40 millones de pesos. Estamos hablando de inversiones que no se hacen en un solo ejercicio, sino por etapa, y hay que ir trabajando para dejar listo a la siguiente administración la operación del mismo”.

Montañez Castro también se pronunció a favor de nuevos métodos “porque ya no podemos seguir enterrando la basura. Hay esquemas para el relleno seco, depende de que se adquiera esa cultura de separar, reciclar y reutilizar materiales para que llegue la menor cantidad posible de desechos y se pueda incrementar de manera significativa la vida útil”.

Como parte integral de este proyecto se necesita ordenamiento territorial y que los centros laborales, supermercados y todos los servicios que requieren los ciudadanos estén cerca de sus hogares para evitar el uso de automóviles y se decidan por movilizarse en bicicletas. Es como lo hacen en las grandes urbes del primer mundo para controlar la contaminación y ser amigables con el medio ambiente.

No hay que olvidar que Aguascalientes es el segundo estado con más automóviles por ciudadanos y es que por familia hay dos o más.

En el caso de Villa Sur y colonias aledañas se requiere que haya centros comerciales, fruterías, papelerías y todo lo que los vecinos necesitan para no tener que trasladarse por kilómetros para poder satisfacer sus necesidades más básicas.