“Si hay Necesidad Abriremos los Templos a Desplazados”

Por Benny Díaz

Fotografía relevante a la nota.

Juan Espinoza Jiménez (Foto: Página 24)

El obispo Juan Espinoza Jiménez se dijo preocupado por la violencia que impera en muchos lados del país. Como pastor de la diócesis de Aguascalientes le toca parte del territorio de Jalisco y Zacatecas, en donde las autoridades se han visto rebasadas por el narcotráfico.

El purpurado dijo que el domingo acudió a Teocaltiche y habló directamente con los sacerdotes sobre el tema. Les preguntó si ellos han sido amenazados o visitados por gente de los grupos delincuenciales, a lo que le respondieron que no, “hasta el momento no les han faltado al respeto y espero que así siga”.

La postura de la Iglesia Católica es que “es abierta, universal, no sectaria ni de élites. Tenemos que estar al lado de toda la gente que ha sufrido de la violencia y también cerca de los hermanos que hacen mal, que crean violencia y matan sin darse cuenta que lo hacen con sus hermanos. Si los encontráramos estaríamos en un diálogo para invitarlos a la conversión y amor a la iglesia. Nos duele saber de estas situaciones y vengo de un ambiente donde se ha sufrido mucho (Michoacán), y como iglesia estamos del lado de las víctimas”.

En Zacatecas los grupos delincuenciales han comenzado a desplazar habitantes de comunidades rurales, sobre todo de la serranía, ante lo cual el obispo se mostró consternado y aseguró que “si hay necesidad, abriremos las puertas de los templos a los desplazados”.

Son personas a las que les dejan llevarse lo que puedan, y a veces muy poco o nada, y ante esto no se puede ser indiferente.

Sí Habrá Eventos en Semana Santa

Por otro lado, el obispo afirmó que sí habrá eventos litúrgicos y religiosos con motivo de la cuaresma y semana santa, en donde se recuerda la pasión y muerte de Cristo.

Eso sí, fue claro al decir que se respetarán todas las indicaciones de las autoridades de salud y “aunque sea con poquita gente, pero se llevarán a cabo las celebraciones en los templos”.

El purpurado dijo que la gente necesita acercarse a los templos para hacer oración después de la soledad y aislamiento que “todos hemos sufrido”, debido a la pandemia.

Anunció que en los ejercicios cuaresmales se abordará el tema de la familia. También pidió orar mucho por los seminaristas, porque son los próximos sacerdotes y “no estamos formando intelectuales, sino pastores; se reza y ora, pero no formamos monjes, sino personas con fe firme para ser los mejores en guiar a la gente”.

Reconoció que es difícil atraer a los jóvenes al catolicismo en la práctica, sobre todo porque están expuestos a muchas cosas, mínimo un celular que les abre las puertas a todo, pero se trabajará en eso y “nos ayudan mucho los colegios católicos. Todo se empieza sembrando un granito de mostaza”.