“En 10 u 11 Años no se Había Dado”

Por Benny Díaz

Fotografía relevante a la nota.

Juan Carlos Rodríguez García

Los integrantes de la Cámara Nacional de Desarrolladores de Vivienda (CNDV) están en desacuerdo con la decisión que tomó “de un día para otro” el alcalde Leonardo Montañez Castro de incrementar en un 50 por ciento el Impuesto Sobre la Adquisición de Bienes Inmuebles (ISABI), algo que “no tiene justificación porque no se había hecho en 10 u 11 años y fue algo muy desproporcionado”.

Así lo dijo en entrevista Juan Carlos Rodríguez García, presidente de CNDV en la entidad. Aseguró que dicha industria se ha visto afectada en los últimos años porque aunque sí se venden viviendas, sólo el 50 por ciento opta por la escrituración, que es donde se cobra dicho impuesto.

No hace mucho tiempo “andábamos entre 4 mil millones de pesos, y ahora arriba de los seis mil millones, pero no significa que puedan cobrar un 50 por ciento más de ISABI, que tuviéramos que darles la mitad, porque también lo escriturado ha sido arriba del 50 por ciento y significa que tuvieron una recaudación mayor e importante en el municipio”.

Rodríguez García aseguró que por la pandemia la situación no ha sido fácil, “y que con todo y eso vengan y hagan un cobro de esta naturaleza a quien va a afectar directamente es al trabajador, quien tiene que pagar su enganche, gastos de escrituración y los impuestos. Esto les va a causar un descalabro fuerte a las familias que ganan entre 1 y 15 mil pesos mensuales”.

Por eso hizo un llamado al presidente municipal, regidores, síndicos y diputados a que reconsideren esto porque en la mayoría del país el impuesto es del dos por ciento y es creciente conforme se va escriturando “y nosotros lo hacemos sobre el avalúo y es el municipio quien se encarga de dictaminarlo”.

La intención es que no se afecte a las familias que buscan hacer un patrimonio al adquirir su vivienda, sobre todo a las que están dentro de la vida productiva formal, “ya que casi todas las compras se hacen vía Infonavit, Fovissste o porque declaran impuestos a los bancos que les prestan para poder comprar su casa”.

Es así que “están afectando a la población de menores ingresos y, por consecuente, a encarecer los gastos que estos trabajadores van a hacer al momento de pretender adquirir su casa”.

Los desarrolladores también pagan el gravamen al momento de adquirir los territorios donde harán los fraccionamientos, y si se les encarece el 50 por ciento, el impacto para los que compran su casa será doble.