Por Diana Rivera Bonifaz

LOS PRIMEROS 100 días de una administración marcan el rumbo en que se va a dirigir la nación. Durante este periodo de tiempo, el nuevo presidente en cargo tiene la tarea de ejecutar sus compromisos de campaña y asegurarle a la población que va a cumplir con creces. El caso de Estados Unidos es ejemplar.

JOE BIDEN, el presidente norteamericano, durante sus primeros 100 días de mandato ha dado un giro abismal en sus decisiones políticas, en contraste con las órdenes ejecutivas y los discursos de la administración previa de Donald Trump. Como dictaba en unos de sus decretos de campaña, el líder demócrata echó para atrás muchas de las medidas más controversiales del presidente anterior.

PARA CONMEMORAR sus 100 días de mandato, el miércoles 28 de abril, Joe Biden, se dirigió al Congreso en donde habló de vacunación, cambio climático, migración y política exterior. “El paso es de la crisis a la oportunidad, todos reconocemos que la vida puede golpearnos, pero en esta nación jamás nos quedamos rendidos, Estados Unidos está levantándose de nuevo, eligiendo la oportunidad sobre el miedo”, comentó Biden durante su primer discurso ante el Congreso.

DESDE EL inicio de su mandato, el 20 de enero, Joe Biden actuó rápidamente para garantizar a los ciudadanos americanos las vacunas contra el COVID-19. En menos de dos meses desde el día en que tomó posesión, Biden firmó una ley de ayuda por coronavirus de US $1,9 billones. Esto dio paso a una vacunación exitosa en el país, es decir 200 millones de dosis aplicadas en su gobierno. Además, se le dio permiso a los mayores de 16 años de ser vacunados, cuando previamente era para mayores de 18.

EL ASUNTO del COVID-19 es el que mayor alertaba a la población estadounidense. Sin embargo, la salud pública no es todo. La pérdida de empleos era también un tema crucial durante la votación. Debido a la pandemia, la seguridad laboral se vio afectada y millones de estadounidenses perdieron su empleo. Ante este panorama, Joe Biden se encargó de generar más empleos y de otorgarle subsidios a los desempleados.

ADEMÁS, CON el rápido proceso de vacunación que se está llevando a cabo, las escuelas están reabriendo, los trabajos están regresando y la situación va mejorando. Esto quiere decir que muchos estadounidenses sienten una sensación de normalidad con una seguridad que Donald Trump no fue capaz de transmitir en sus últimos meses de mandato.

OTRO TEMA importante en la agenda pública es la justicia social y la desigualdad racial en el país. Durante el mandato de Trump el movimiento de Black Lives Matter tuvo un fuerte auge y predominó en el aire estadounidense la supremacía blanca. Biden condenó todas las acciones de Trump tomadas con respecto a estos temas y declaró que no sólo hay una pandemia de salud, sino que también existe una pandemia que es el racismo sistemático y la desigualdad estructural. Para reforzar sus decretos, el líder demócrata hizo historia con la condena de Derek Chauvin, el expolicía que asesinó a George Floyd.

EN CUESTIONES de migración y refugiados, Joe Biden ha retomado las riendas del DACA y anunció la creación de alrededor de 11 centros temporales de asistencia para garantizarle a los niños migrantes condiciones adecuadas. La inmigración ilegal es un tema importante para esta administración puesto que las políticas públicas anteriores del gobierno de Trump eran discriminatorias y le cerraban por completo las puertas a las personas que buscaban asilo hasta que tuvieran las fechas de sus tribunales de inmigración en Estados Unidos.

LAS RELACIONES exteriores fue un tema del cual también se habló en su discurso de los primeros 100 días de mandato. Durante la administración de Donald Trump, la política exterior de Estados Unidos fue manejada a través de la plataforma de Twitter (acción que erradicó Biden) y se mantuvieron tensas las relaciones diplomáticas con muchos países y organismos internacionales.

EN EL DISCURSO, Biden comentó que se le dará mayor prioridad a la relación con China y se planean desarrollar nuevas tecnologías estadounidenses para competir de manera más efectiva con el país asiático. Asimismo, el líder demócrata aclaró que, aunque condena gravemente la interferencia de Moscú en las elecciones de Estados Unidos, no desea escalar estos ataques. Al contrario, espera trabajar en equipo para contrarrestar las amenazas nucleares de Irán y Corea del Norte.

A PESAR de todos estos logros, la administración de Joe Biden todavía enfrenta muchos obstáculos dentro de su país. Uno de ellos es restaurar el bipartidismo y la unidad en el Congreso, que quedó con una división fuertemente marcada con la salida de Donald Trump. Esperemos que Joe Biden siga cumpliendo con sus promesas y el Congreso lo apoye en sus decisiones.