Los “Restos” de Emiliano Zapata en Aguascalientes a 100 Años de su Muerte

Por Vicente Agustín Esparza Jiménez / Centro INAH Aguascalientes

Algunos “restos” de Emiliano Zapata en Aguascalientes

Algunos “restos” de Emiliano Zapata en Aguascalientes

EL 10 DE abril de 1919 Emiliano Zapata fue asesinado en la hacienda de Chinameca, perteneciente al estado de Morelos, región que fue su centro de operaciones militares desde 1911 hasta 1919, desde donde se opuso y combatió a Díaz, León de la Barra, Madero, Huerta y Carranza.

 ES CONOCIDO que, en el porfiriato, se levantaron monumentos, se rebautizaron calles y se conmemoraron hechos de armas, aun estando vivos los participantes de aquellas batallas. Los revolucionarios hicieron lo mismo, pero una vez muertos los homenajeados, como pasó con Madero y Pino Suárez, pues estos mártires revolucionarios fueron recordados en calles y plazas de la ciudad, así como en actos cívicos en el teatro Morelos de Aguascalientes durante el periodo armado. El caso de Zapata fue similar, aunque un poco más tardío y esporádico, cuando menos en Aguascalientes, como veremos a continuación.

 AUNQUE DESDE la primera mitad del siglo XIX se conmemoraban batallas y se festejaban a héroes, fue en el centenario de la independencia nacional en 1910, que comenzó “la era de las conmemoraciones” centenarias, añadiéndose a partir de entonces los cincuentenarios, sesquicentenarios y bicentenarios, repitiéndose así el ciclo del ritual cívico. El objetivo de las conmemoraciones y los festejos era, y sigue siendo, legitimar al grupo en el poder, pues cada Estado impone las memorias que le convienen y recuerda a personajes que le son afines. Por esta razón, como en su momento lo hizo Porfirio Díaz con Benito Juárez (a pesar de ser enemigos políticos en determinado lapso), que lo elevó a Héroe nacional, lo mismo hizo Álvaro Obregón, pues entendió muy bien la situación que vivía México y empezó a organizar la “resurrección” de la imagen de Zapata al recordarlo en eventos cívicos.

 DESDE LOS años 20’s las conmemoraciones de Zapata fueron frecuentes y cada vez más faustosas, con arcos de triunfo, música y oradores, sobre todo zapatistas sobrevivientes a quien el Estado incorporó para ocupar cuando menos simbólicamente los territorios zapatistas que no había podido dominar aun tras la muerte de Zapata. A lo largo de los años el recuerdo de Zapata se fue afianzando y alcanzó su esplendor en la época cardenista, pues justificaba muy bien los logros del régimen, por lo que a Cárdenas se le llegó a ver como el continuador y el que materializó la obra del zapatismo.

 RESPECTO A actos cívicos, en el estado de Morelos en el año de 1929 se recordaron los 10 años del fallecimiento del “Agrarista Emiliano Zapata”, cuya representación por el estado de Aguascalientes estuvo encabezada por el Senador Miguel Ramos en sustitución del gobernador Manuel Carpio. En 1934 se volvió a repetir la invitación por parte del gobierno del estado de Morelos al de Aguascalientes, esta vez para recordar el XV aniversario luctuoso de Zapata. Posteriormente, en el año de 1936 en Aguascalientes también se realizaron actos cívicos en honor a Zapata en el teatro Morelos, consistentes en veladas literario-musicales.

 SIN EMBARGO, ¿en qué otros “lugares de la memoria” encontramos la figura de Emiliano Zapata en Aguascalientes? Además de los actos cívicos, el primer recuerdo de Emiliano Zapata en el espacio público de la ciudad de Aguascalientes fue en 1925 al imponerle su nombre a una calle del centro de la ciudad, que anteriormente era conocida como Santa Bárbara. Con el tiempo, encontramos la imposición de su nombre a escuelas y poblados, sobre todo en el área rural, ya que esta imagen o representación lo traía a la memoria de las comunidades agrarias. Pero también en la ciudad capital encontramos “restos” o “huellas” de Zapata. Por ejemplo, su nombre también aparece en colonias y escuelas, empero, su imagen la encontramos unida a la Convención de Aguascalientes, no solamente como memoria, sino también como historia, dado que en la Convención se aceptó el Plan de Ayala por las distintas fuerzas revolucionarias que concurrieron en octubre de 1914 al teatro Morelos, ideas que serían plasmadas en la Constitución de 1917.

 COMO MEMORIA, aparece indirectamente mencionado en el corrido de la Convención, dicho canto evoca a la Convención como un hecho histórico derrotista y ensalza la figura de Venustiano Carranza, ya que desde la perspectiva del carrancismo canta lo ocurrido en Aguascalientes de octubre a noviembre de 1914, pasando por el estrujamiento de la bandera por Antonio Díaz Soto y Gama (hubo debates caldeados/ para rebatir la idea,/y un enviado de Zapata/hizo una ofensa muy fea), así como la designación de Eulalio Gutiérrez como presidente provisional de la República, el desconocimiento de la Convención por Carranza, hasta las acciones bélicas de 1915 entre Villa y Obregón en el Bajío mexicano, culminando con el triunfo de Carranza.

 ASIMISMO, EN 1964 durante la conmemoración del cincuentenario de la Convención, Zapata aparece en una moneda conmemorativa junto a Villa y Carranza con la leyenda: “intentaron la unificación revolucionaria”. Lo mismo durante el 75 aniversario de la Convención en 1989, pues en un altorrelieve ubicado frente al teatro Morelos (sede de la Convención) aparecen las figuras de Emiliana Zapata, Venustiano Carranza, Francisco Villa y Eulalio Gutiérrez. Lo mismo que en la moneda conmemorativa, en esta escultura el discurso que se pretendió dar fue de unidad nacional, al incluir a las diferentes facciones revolucionarias reunidas en la Convención. Esta fue la memoria que diferentes gobiernos quisieron imponer, pero si cruzamos estos “restos” del pasado con la historia, diríamos que se incurrió en una falsedad histórica, dado que Carranza y Zapata no estuvieron en la Convención de Aguascalientes.

 TAMBIÉN SU figura aparece junto a los bustos conmemorativos de Villa, Obregón y Carranza, localizados en el vestíbulo del teatro Morelos, que en un primer momento estuvieron exhibidos en el museo de la Convención. Asimismo, Zapata aparece junto a Villa en el mural del Palacio de Gobierno de Aguascalientes pintado en 1991 por el chileno Oswaldo Barra; la imagen es muy parecida a la fotografía histórica de Agustín Víctor Casasola tomada el 6 de diciembre de 1914 en el salón presidencial de la República, tras entrar victoriosos a la Ciudad de México. Igualmente, los veteranos de la Revolución de Aguascalientes mandaron elaborar un retrato de Zapata que hoy se encuentra en el Archivo Histórico del Estado y, en lustros pasados, se erigió un monumento al norte de la ciudad, junto a la carretera 45 para que fuera visible a todo aquel que llegara o saliera de la urbe.

 POR FINAL, la historiografía que se ha escrito sobre el personaje es vasta y su centenario luctuoso ha servido para hacer coloquios, ensayos y libros para comprender al personaje, sus compañeros de armas, el Plan de Ayala y sus implicaciones políticas y sociales. Cabe decir que el nombre de Plan de Ayala también aparece en nombres de calles y pinturas murales en Aguascalientes, lo mismo que frases como “tierra y justicia” y, “tierra y libertad”. Por lo tanto, la figura de Zapata ha sido utilizada por el Estado mexicano (cuando menos desde la segunda década del siglo XX), para legitimarse al invocar el proyecto agrarista del zapatismo, así como el lema de la justicia social.

Fuentes:

AHEA-FSGG, 247 Bis/47; 559/251; AHEA-PL, 201/12. AGMA-FH, 944/11. Samuel Brunk, “La muerte de Emiliano Zapata y la institucionalización de la Revolución Mexicana”, consultado en: https://digitalcommons.utep.edu/cgi/viewcontent.cgi?referer=https://www. google.com/&httpsredir=1&article=1001&- context=sam_brunk; Felipe Arturo Ávila Espinosa, “¿Por qué fue asesinado Emiliano Zapata? A cien años de aquel abril de 1919”, en Relatos e historias en México”, año XI, número 128; Luciano Ramírez Hurtado, Imágenes del olvido 1914-1994.

Discurso visual, manipulación y conmemoraciones de la Convención Revolucionaria de Aguascalientes, Aguascalientes, Universidad Autónoma de Aguascalientes, 2010; Laura Elena Dávila Díaz de León, “Los corridos de la Convención de Aguascalientes”, en Esparza Jiménez, Vicente Agustín (Coordinador), “La Convención Revolucionaria de Aguascalientes. Memorias, imágenes y documentos”, Aguascalientes, Instituto Municipal Aguascalentense para la Cultura, 2015.